Llevamos meses asistiendo a nuevos ataques contra la minería del carbón y sus trabajadores. Cuestión que no hace sino ahondar en la crisis que atraviesa el sector desde la entrada en la UE, agravada por las gestiones del PSOE y el PP. Desde las privatizaciones de las empresas eléctricas publicas, pasando por los sucesivos planes del carbón y su incumplimiento (plantillas, reindustrialización, produccion, corrupción de los fondos…), hasta el marco de cierre para el 2018 firmado por el PSOE y la actual política carbonicida del PP durante estos últimos cuatro años.
No podemos consentir que mientras en los pueblos y comarcas mineras se plantean ERES, y el paro, la miseria y los desahucios aumentan, pasen por delante de nuestras casas cientos de camiones de carbón de importación. Tampoco podemos tolerar las condenas de prisión a los compañeros mineros que lucharon en anteriores huelgas por sus derechos.
España necesita un Plan Energetico que vaya tendiendo desde la planificación democrática y desde lo publico a la soberanía energética, nacionalizando el sector eléctrico y minero, aumentando la presencia del carbón autóctono en el mix energético, y emprendiendo un plan que, desde lo público, reindustrialice las cuencas mineras.
Hoy los mineros y las cuencas volvemos a la calle en lucha por nuestros derechos como obreros a trabajar, y por el derecho de las comarcas a vivir. Desde la Unión de Juventudes Comunistas de España y el Partido Comunista de España animamos a los mineros en su lucha,que es la de todos, y hacemos un llamamiento a la unidad de los trabajadores de la minería (independientemente de si se es de interior, exterior, comarcas o empresas diferentes, tanto públicas como privadas o subcontratas). Apoyamos las movilizaciones en todas sus expresiones y animamos a las cuencas y al resto de la clase trabajadora a apoyar a un sector que siempre se ha mantenido a la vanguardia.
¡Las cuencas se salvan, LUCHANDO!
¡La Clase Trabajadora #ALaOfensiva!