Creemos necesario como UJCE en la celebración de nuestro XV Congreso posicionarnos en contra de la anunciada candidatura para acoger los Juegos Olímpicos de invierno del año 2030 en diferentes instalaciones de las regiones de Aragón y Catalunya.
En el marco de nuestras tesis sobre el colapso ecológico, estamos en contra de este megaproyecto que generará un gran impacto ambiental. Además, destinar un derroche de fondos a este propósito es una tramposa estrategia de nuestras instituciones, que condenan a las regiones pirenaicas a una dependencia absoluta del negocio de la nieve, cuya explotación se ve cada año más limitada y variable debido al proceso en marcha de cambio climático y que también profundiza en un modelo productivo de precariedad y temporalidad que se ceba y expulsa, especialmente a la juventud del Pirineo de ambas regiones.
Por otro lado, la candidatura profundiza en el papel de ambos gobiernos autonómicos como aseguradores de las rentas y beneficios del capital, mediante ‘’pelotazos’’, con la construcción de unas infraestructuras que, lejos de ser de uso público, acaban privatizadas en el circuito de unos deportes francamente elitistas y no accesibles en la práctica.
En conclusión, debemos posicionarnos radicalmente en contra de proyectos megalómanos especulativos y altamente dañinos para el medio, que no solo no mejoran la vida de la clase trabajadora, sino que literalmente la condenan a una mayor precariedad y exclusión, ahondando en la crisis de recursos y la contradicción capital-medio. Llamamos a la movilización popular, y al apoyo a las iniciativas que se están ya llevando a cabo en Aragón y Catalunya por parte de los diferentes movimientos sociales y organizaciones de clase.